Aqui en silencio adoratriz contemple a Dios

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Basilica San Pedro , Vaticano

Amigos que Dios trae a este rincon de la red.

sábado, 8 de mayo de 2010

El yo exterior y el yo interior

"El yo exterior, el yo de los proyectos, de las finalidades temporales, el yo que manipula objetos con el fin de tomar posesión de ellos, permanece completamente ajeno al yo escondido, interior, que no alberga proyecto alguno y que no busca ningún logro, ni tan siquiera el de la contemplación. Tan solo quiere ser, y moverse (porque es dinámico) según las leyes secretas del mismo ser, y de acuerdo a los impulsos de una Libertad Superior (esto es, de Dios), antes que planificar y obtener logros que obedezcan a sus propios deseos.
El yo interior es precisamente esa identidad que no puede ser engañada ni manipulada por nadie, ni siquiera por el diablo. Es como un animal salvaje muy huidizo que jamás aparece cuando detecta la cercanía de la menor presencia extraña y sale al exterior únicamente cuando todo está en perfecta calma y en silencio, cuando nadie le molesta y está solo. Nadie le puede hacer salir mediante engaños porque no responde a otro señuelo que no sea el de la libertad divina.
Triste es el caso de ese yo exterior que imagina ser contemplativo y busca alcanzar la contemplación como el fruto de un esfuerzo planificado y de la ambición espiritual. Asumirá actitudes diversas, meditará sobre el significado interno de sus propias posturas y tratará de fabricarse para sí mismo una identidad contemplativa: pero mientras esto sucede, no hay nadie allí. Tan sólo un yo ilusorio, ficticio, que se busca a sí mismo, que lucha para crearse a partir de la nada, y cuyo ser se mantiene por su propia compulsión, preso de una ilusión privada.
La llamada a la contemplación ni es ni puede dirigirse a ese yo".


Thomas Merton.
del Blog Amigos de TOMAS MERTON

2 comentarios:

  1. Creo que el yo interior ayuda al yo exterior; creo que los procesos del yo interior están encaminados a construir la vida de la persona humana, una vida de abundancia y de alegría. Cuando nacemos, cuando vemos la luz, necesitamos sentir que estamos vivos: comer, tener experiencias sensomotoras, necesitamos amor en nuestro entorno.

    Un entorno saludable, sin hostilidad, en su acepción más amplia, ayuda al crecimiento, desarrollo y progreso de la persona completa.

    Creo que esas son las leyes encomendadas por Dios a la Naturaleza.

    Si el ambiente en el que nos movemos es adverso la persona muere interior y exteriormente...

    Necesitamos cantar y alabar, necesitamos celebrar la vida y dar gracias a Dios...

    Hoy como ayer la persona humana necesita un proyecto de felicidad...

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  2. Gracias Carmen hermosas palabras.
    Creer , esperar y amar
    Es el triduo hacia la felicidad
    una brazo
    adri

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"No debáis nada a nadie, sólo sois deudores en el amor" (Rm 13,8)

Usa el crucifijo . Da testimonio de Cristo Vivo .

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Colgate la cruz en el cuello, te protegera de todo peligro, sera tu aliada en la tentacion y espantara todo mal.